Los ingredientes necesarios:
Cebolla
Ajos
Guindilla o Cayena
Harina
Vino
Blanco
Caldo
de carne
Orégano
Sal
y pimienta
Aceite
Una receta muy fácil de preparar, puede ser un segundo plato por
sí sola o bien como guarnición para las carnes. Los champiñones los prefiero
comprar en las fruterías, mejor que los que vienen en blíster de las grandes
superficies y siempre procurando que el sombrerito este bien cerrado al tallo,
eso significa que son frescos, debemos tener en cuenta que al cocinarlos
reducen su volumen a la mitad.
Comenzamos limpiando los champiñones, cortamos el trozo de tallo
que suelen traer todavía arena, luego bajo el grifo de agua fría los lavamos
muy bien, no hace falta pelarlos. Cortamos en cuartos.
Picamos la cebolla y la refreímos en una sartén con aceite de
oliva, junto con un par de dientes de ajo picaditos y la guindilla o cayena, debéis
tener en cuenta el grado de picante que queráis darle a la salsa, así que
retirarla al gusto.
Cuando la cebolla este pochadita, añadimos una cucharada de
harina y la tostamos un poco, es lo que nos espesará luego la salsa.
A continuación incorporamos los champiñones y rehogamos unos
minutos a fuego fuerte, salpimentamos.
Vertemos el chorrito de vino blanco, si quieres en lugar de vino
puedes ponerle brandy, dejamos unos instantes que se evapore el alcohol.
A continuación ponemos un poco de caldo de carne, en esta
ocasión diluí una cucharadita de Bovril en agua templada, ahora añadimos un
poco de orégano o perejil.
Cocinamos unos minutos a fuego medio, sin tapar para que se vaya
evaporando el caldo y nos quede la salsa espesita.
Dejamos reposar y ya tenemos listos nuestros champiñones en
salsa.
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